Guía para explorar Boston como un profesional
Boston es una ciudad íntima, llena de rincones llenos de arte, historia y cultura listos para ser explorados; desde las raíces italianas del North End, hasta las típicas fachadas de ladrillo y el encanto de Nueva Inglaterra, la ciudad tiene magia en cada esquina.
24 de febrero de 2025
También conocida como “La Cuna de la Libertad”, esta ciudad alberga los primeros momentos clave para la historia de la Independencia de Estados Unidos, datando de 1773 cuando ocurrió la famosa fiesta del té donde se arrojaron 342 cajas de esta bebida por la borda en el puerto de la ciudad como acto simbólico de resistencia ante Gran Bretaña y dio pie a la eventual guerra de Independencia.
La guía ideal para este viaje no existe, pero sí la forma de hacer que cada día en esta ciudad valga la pena conociendo más allá de lo turístico, integrándote a la esencia de los barrios como si fueras un local.
¿Cómo moverse?
El sistema de transporte público es muy fácil de usar, por lo que para hacer más eficiente tu día, puedes conseguir en cualquier estación de metro la CharlieCard y hacer recargas por viaje, día, semana o mes, según tus planes de viaje. Esta tarjeta, la puedes usar para el metro, autobús, Silver Line y Mattapan Line.
Planifica tus días:
Cada uno de los vibrantes barrios de la ciudad, tiene un concepto distinto gracias a los diversos grupos establecidos a lo largo de esta, por lo que no importa la ubicación de tu hospedaje, siempre habrá algo que disfrutar a sus alrededores.
Donde todo comienza
Inicia tu recorrido caminando a través del Freedom Trail, una ruta de cuatro kilómetros que conecta 16 sitios y monumentos históricos relacionados con la lucha de la Independencia de Estados Unidos y otros momentos importantes del Boston moderno.
Durante este camino, conocerás puntos llenos de historia como el Boston National Historical Park, que tiene con sitios turísticos impresionantes, como el USS Cassin Young, un barco restablecido de 1943 que sobrevivió a las batallas del Pacífico de la II Guerra Mundial y a los ataques kamikaze; el USS Constitution Museum, un museo interactivo cerca de la fragata de 1797, que recibió el sobrenombre de “Old Ironsides” en la guerra de 1812, así como el Bunker Hill Monument, un obelisco de granito de 67 metros de altura que conmemora la batalla de Bunker Hill, con 294 escalones y vistas panorámicas.
Para disfrutar de un inolvidable atardecer, puedes dirigirte a la zona de Beacon Hill y el Boston Public Garden, el primer jardín botánico público de Estados Unidos con fines decorativos, con senderos diseñados para pasear que conservan tradiciones victorianas y permite admirar las plantas perfectamente pensadas, así como la laguna, los monumentos y las fuentes, y los tradicionales barcos cisne creados y operados durante más de 100 años por la familia Paget.
Sueños antiguos en la era moderna
Para una inmersión cultural, dirígete al sur de Boston para disfrutar del Museo de Bellas Artes de Boston, con alas neoclásica y moderna y una vasta colección que va del antiguo Egipto al arte americano contemporáneo incluyendo obras de Renoir, Monet, Cézanne, Degas y Van Gogh. De igual forma, uno de los lugares favoritos entre locales y visitantes, es el Isabella Stewart Gardner Museum, una galería que imita el estilo veneciano del siglo XV y toma su nombre de una millonaria amante de las artes que viajó por el mundo en busca de las obras que pueden verse hoy en día. En sus tres pisos de extensión, se exhibe una fantástica colección de más de 2.500 pinturas, esculturas, muebles, libros peculiares y otros curiosos artículos.
Ciudad de campeones
Boston es anfitrión de cuatro de los equipos deportivos más queridos de todo el país, por lo que en tu itinerario no puede faltar la visita a cualquiera de las casas de estos deportes, que incluso si las fechas coinciden, te proporciona una oportunidad inolvidable de ver a tus atletas favoritos en acción.
Si eres amante de baseball, el Fenway Park debe encabezar la lista de tus lugares por visitar, ya que es el estadio de las grandes ligas más antiguo de Estados Unidos, marcando su lugar en la historia del deporte. Este parque es el hogar del mundialmente famoso equipo de béisbol Boston Red Sox, que ofrece recorridos desde 15 minutos hasta todo el día para ir tras bambalinas y conocer la historia del estadio, los vestidores y el Red Sox Hall of Fame.
Para los seguidores del basketball y hockey, los Boston Celtics y los Boston Bruins comparten casa en el corazón de Boston, desde el TD Garden, este complejo deportivo y de entretenimiento es además el más grande de toda la región de Nueva Inglaterra, que también es sede para conciertos y otros eventos culturales, y alberga en el piso 3 el Museo del Deporte, y en el piso 9 todas las banderolas de los campeonatos y disfrutar de unas vistas privilegiadas de todo el estadio, incluidas las camisetas y los equipos utilizados durante los partidos.
En Foxborough, aproximadamente a unos 45 minutos del centro de Boston, se encuentra uno de los estadios de fútbol más icónicos de toda la liga, el Gillette Stadium de los New England Patriots, uno de los más premiados de toda la historia del deporte. Aquí podrás descubrir la historia de los Patriots en el fútbol mediante exhibiciones interactivas en el Patriots Hall of Fame, luego, subir al Gillette Stadium Lighthouse para tener increíbles vistas de Boston y Providence, Rhode Island, desde la plataforma de observación, sin dejar pasar el Patriots Place, un centro comercial al aire libre construido alrededor del Estadio.
Boston y alrededores
Ciudades coloridas y pequeños pueblos al norte de Boston celebran su fascinante historia durante todo el año, lo que les da a los visitantes la oportunidad de participar en cautivantes eventos culturales. Uno de los pueblos más populares es Salem, que a pesar de haber ganado su fama gracias a las historias alrededor de los juicios por brujería del siglo XVII, es un pequeño poblado acogedor que sus edificios te invitarán a explorar su historia y pequeños rincones inesperados como el jardín de Ropes Mansion and Garden, en el cual podrás encontrar varios locales que salen a caminar, leer en sus bancas o solo a tomar el aire durante todo el día.
Otra de las zonas imperdibles es Cambridge, una de las ciudades más antiguas de Estados Unidos, que por lo mismo, tiene una larga y rica historia que la ha establecido como un centro educativo y cultural de renombre en todo el mundo, ya que alberga las dos de las universidades más prestigiosas del mundo, Harvard y el MIT. Ya sea que estés buscando un paseo tranquilo o una salida nocturna por la ciudad, Cambridge tiene todo para cerrar con broche de oro tu viaje por Nueva Inglaterra.
Tanto Harvard como el MIT, tienen espacios y actividades abiertas al público en general por lo que podrás explorar los museos, exhibiciones interactivas y explorar las bibliotecas, así como asistir a conferencias, seminarios y otros eventos, o tan solo disfrutar de los hermosos jardines y senderos de la zona.
Con sus restaurantes, tiendas, hoteles y vida nocturna, Cambridge es el lugar perfecto para explorar la cultura de Nueva Inglaterra, mientras te envuelve en un acogedor y amigable ambiente de tranquilidad que te hará sentir parte de esto.
¿Dónde comer?
Boston se distingue también por su propuesta gastronómica vibrante y diversa, que refleja su herencia portuaria y su carácter cosmopolita. Desde los clásicos mariscos frescos, como la mundialmente famosa langosta, hasta los innovadores platos que incorporan influencias globales, la cocina de Boston es un festín para los sentidos.
Para comenzar tu día, elige una cafetería popular local como Tatte Bakery & Café, que tiene varias sucursales a lo largo de la ciudad, y ofrece menús completos durante las 24 horas.
Siguiendo con el lado histórico de la ciudad, ubicado en Freedom Trail, cerca de Faneuil Hall, se encuentra el Union Oyster House, que disfruta de la distinción de ser el restaurante más antiguo de Estados Unidos. Este establecimiento de Boston, ubicado en un edificio que data de la época pre-revolucionaria, comenzó a servir comida en 1826 y ha continuado desde entonces con su icónica barra de ostras.
Uno de los barrios favoritos para comer en toda la ciudad, es North End, la zona donde converge lo mejor de dos mundos: Estados Unidos e Italia. Este vibrante barrio está lleno de restaurantes y trattorias familiares con ambientes auténticos y hogareños como el caso de TABLE, un grupo gastronómico que ofrece distintos conceptos como café y gelato y sus famosos sándwiches de focaccia casero hechos al momento que te dejarán pensando en su auténtico sabor por días. Al igual que Mamma María, una aclamada cocina italiana auténtica servida en cinco elegantes áreas de comedor dentro de un establecimiento histórico del año 1830, construido con ladrillo adosado, que cuenta con vistas a la plaza pública más antigua de Estados Unidos, North Square.
Para cerrar el día, elige entre cenas tranquilas en la zona de Beacon Hill tiene una amplia oferta gastronómica como 75 Chestnut, un íntimo restaurante que abre sus puertas a una cocina fusión italiana-neoinglesa con platillos especiales como la pasta con langosta de Maine o los ravioles con calabaza y queso de cabra de Vermont, y South Boston, una energética zona llena de tavernas y bares con música en vivo y una variedad de cervezas artesanales locales en su menú que enaltecen los sabores de los productos de Nueva Inglaterra, como Layla’s American Tavern, que como la mayoría de estos lugares abre sus puertas temprano, para disfrutar de su menú y acogedor ambiente.
De igual forma, si te encuentras en Cambridge, podrás descubrir diversas opciones de restaurantes alrededor de Harvard Square, como Rusell House Tavern si es que buscas comida tipo americana, cervezas locales y mixología creativa de temporada, además su extenso menú de aperitivos; o joyas escondidas como Henrietta’s Table, dirigido por el Chef Sean Lizotte y ubicado dentro de The Charles Hotel, es un encantador restaurante estilo farm to table, donde el staff se asegurará de hacerte sentir como en casa, ofreciendo menús que rotan según la disponibilidad de ingredientes de sus proveedores locales para garantizar la frescura, calidad e innovación en los platillos que sirven, además de una carta de vinos y cervezas artesanales que provienen únicamente de Estados Unidos.
Recorrer los rincones, museos, restaurantes, estadios y monumentos de Boston es una invitación a descubrir historias del pasado, que abre las puertas a nuevas experiencias y formas de viajar. Al dejar Boston, tus recuerdos serán un reflejo de la ciudad misma: ricos en tradición con un toque de modernidad y un nuevo sentimiento de nostalgia y pertenencia a este clásico que nunca dejará de sorprenderte.
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