Mansiones de la Costa Este: un road trip por la historia y el glamour americano
Arquitectura, lujo y arte en un viaje inolvidable por la Costa Este de Estados Unidos
21 de julio de 2025

La costa este de Estados Unidos guarda entre sus colinas, valles y acantilados una colección incomparable de mansiones históricas que narran la grandeza de los siglos XVIII al XX. Este itinerario de lujo atraviesa tres estados —Nueva York, Connecticut y Rhode Island— y ofrece una experiencia cultural, arquitectónica y paisajística inigualable.
Nueva York: riqueza, arte e historia
El recorrido comienza en Hudson Valley, donde el estilo gótico de Lyndhurst Mansion y la opulencia Beaux‑Arts de Vanderbilt Mansion evocan la era de las grandes fortunas industriales. En Hyde Park, la residencia de Franklin D. Roosevelt, conocida como Springwood, revela la dimensión más íntima de un presidente clave del siglo XX. Muy cerca, Kykuit —el retiro de la familia Rockefeller— deslumbra con su colección de arte moderno al aire libre y sus panorámicas sobre el río. La creatividad se desborda en Olana, la casa del pintor paisajista Frederic Church, inspirada en la arquitectura persa. Más al norte, Schuyler Mansion y Morris‑Jumel Mansion rememoran los debates políticos y las intrigas de la Revolución Americana, mientras que Rose Hill Mansion en los Finger Lakes y Oheka Castle en Long Island añaden un toque de romanticismo victoriano y esplendor europeo, respectivamente. Finalmente, Batcheller Mansion Inn en Saratoga Springs cierra el capítulo neoyorquino con un estallido de ornamentación de alta época victoriana.
Connecticut: elegancia clásica de Nueva Inglaterra
Al cruzar hacia Connecticut, el paisaje costero se combina con la sofisticación de la aristocracia del siglo XIX. En Norwalk, la Lockwood‑Mathews Mansion sorprende con su arquitectura del Segundo Imperio, techos de cristal y salones que rivalizan con los palacios europeos. Más al este, Old Lyme cautiva con la Florence Griswold House, epicentro del impresionismo estadounidense, donde las pinceladas de color parecen fundirse con los jardines ribereños del río Lieutenant. En Woodstock, Roseland Cottage rompe con la sobriedad típica de Nueva Inglaterra gracias a su vibrante fachada rosa y detalles góticos; fue escenario de veranos opulentos y recepciones presidenciales, y hoy conserva su aura bucólica entre parterres geométricos y bojes centenarios.
Rhode Island: el glamour perpetuo de Newport
El viaje culmina en Newport, sinónimo de veranos dorados y fiestas dignas de novelas de Edith Wharton. The Breakers, la residencia más célebre de los Vanderbilt, domina los acantilados con su fachada renacentista italiana y salones adornados con mármoles importados. A pocos pasos, Marble House —regalo de aniversario convertido en manifiesto de poder— deslumbra con un salón de baile recubierto de pan de oro y un coqueto pabellón de té de inspiración china frente al océano. The Elms, inspirado en los palacios franceses de finales del siglo XVIII, muestra la precisión con que se replicaban los gustos europeos en territorio americano, mientras que Rosecliff, con su icónica escalinata y jardín frente al mar, sigue siendo escenario de galas y rodajes cinematográficos. Juntas, estas mansiones revelan el vértice más alto del esplendor Gilded Age, donde el sonido de las olas se mezcla aún con ecos de valses y fuegos artificiales.
Una ruta de patrimonio y belleza atemporal
Este road trip es mucho más que una escapada de lujo: es una lección viva de historia estadounidense, arte decorativo y evolución social. Ideal para viajeros curiosos que buscan experiencias profundas y paisajes memorables, la ruta enlaza el Hudson Valley, los estuarios tranquilos de Connecticut y los dramáticos acantilados del Atlántico en Newport, ofreciendo en cada parada un capítulo distinto del gran relato americano.
Para conocer más sobre Brand USA, visita TheBrandUSA.com y comienza a planear tu próximo viaje en: https://www.visittheusa.mx/.
Descarga imágenes de alta calidad en esta liga.